“Ahora sí, ya le voy a echar ganas”, “es que no tengo tiempo suficiente”, “me falta fuerza de voluntad”, etc. Estas son algunas de las frases más típicas que usamos para consolarnos, después de darnos cuenta que nuevamente hemos postergado esa meta que ronda por nuestra cabeza desde hace meses atrás.

Puede que se trate sobre aprender un nuevo idioma, hacer ejercicio, viajar, comprar una casa, poner un negocio o dejar de fumar; cualquier meta que tengamos en mente requiere de un plan estructurado, con el cual podamos llegar a ese objetivo deseado.

Más allá de pensar en el ¿qué?, se trata de reflexionar en el ¿cómo? Solemos caer en el error de ponernos metas demasiadas abstractas, ambiguas y sin plazos a cubrir, que nos permiten aplazarlas a la menor provocación.

Peter Ferdinand, consultor y profesor de negocios, decía que “lo que no se mide, no se puede mejorar”. (1) De acuerdo con la metodología SMART, una meta tiene que poseer cinco características para ser realizable: ser específica, medible, alcanzable, realista, y oportuna. (2)

Aplica la metodología SMART a tus metas

  1. Específica

Detalla tu meta lo mejor posible. Por ejemplo, si tu meta es comprarte un auto, tienes que definir todas las características del coche que quieres: el color, modelo, si será nuevo o seminuevo, el tipo de compra, ya sea a crédito o de contado, etc.

      2. Medible

Tu meta tiene que ser cuantificable. Divide esa meta en pequeños propósitos, que te permitan medir tu avance. Siguiendo con el ejemplo de comprar un carro, primero que nada deberás investigar los requisitos que te faltan para poder comprarlo.

      3. Alcanzable

Empieza con objetivos pequeños. ¡No te atores a ti mismo!, sé consciente de tus posibilidades y empieza con pequeños cambios. Si tu plan es ahorrar parte de tu sueldo para comprar un auto, comienza por hacerlo solo con el 10% de tus ingresos y ve aumentando poco a poco el ahorro.

      4. Realista

Sé consciente de tus posibilidades. No significa que te pongas metas fáciles o mediocres, sino que establezcas objetivos que estén al alcance de tus medios. Quizá uno de tus sueños sea tener un auto de un millón de pesos, pero en tus posibilidades solo te alcanza para uno de doscientos mil pesos, ¡entonces empieza por ese!

      5. Oportuna.

Ponle fecha. Si tu meta no cuenta con un tiempo límite para cumplirla, lo más probable es que del papel no pase. Es muy fácil tener una lista con metas y propósitos que cumplir, pero si no tomamos acción, estas no se cumplirán solas.

Recuerda que lo más importante para conquistar una meta es la decisión de tomar acción y comenzar. Una vez en el camino, lo demás solo requerirá un poco de motivación y mucha constancia.

 

Fuentes:
Redacción. (2017). Lo que no se mide, no se puede mejorar. 13 de junio del 2020, de NuevaTribuna.Es. Sitio web: https://www.nuevatribuna.es/articulo/consumo/no-mide-no-puede-mejorar/20170621134349141055.html.
Rogelio Villalba García. (2019). Establecer metas y objetivos claros, alcanzables y definidos. 13 de junio del 2020, de ASEPYME Emprendedores. Sitio web: https://asepyme.com/establecer-metas-y-objetivos-alcanzables/